¿Qué se podría hacer en la Comarca del Bajo Aragón si se dispusiesen de 59,7 millones de euros? ¿Ejecutar las obras del hospital de Alcañiz? ¿Desdoblar los 30 km de la carretera N-232 que discurren por su territorio? ¿Fomentar la instalación de industrias cerámicas para que produzcan valor añadido en su propio territorio las tierras que ahora salen en bruto de su suelo para ser aprovechadas en Castellón y Valencia?
Pues no: en tiempos de crisis, recortes y penurias resulta que el Estado está dispuesto a gastarse todo ese dinero en una presa de laminación de avenidas en el río Bergantes que todos los pueblos de la zona rechazan, que destruiría explotaciones agrícolas, empresas turísticas, zonas de baño, espacios protegidos, yacimientos arqueológicos y un paisaje de ensueño. El empeño por llevar esta obra adelante, caiga quien caiga, es tal que el Gobierno de Aragón ha decidido tirar a la papelera el expediente sobre declaración como Lugar de Interés Geológico de este río (con informe, al parecer, favorable) debido al proyecto de embalse. O sea: que los elementos de interés geológico (o, en su caso, medioambiental, cultural, etc.) existen o no en función de que no "estorben" a la ejecución de los agresivos proyectos que prioriza nuestro gobierno. ¡Qué insulto a la inteligencia!
El estudio que sobre este proyecto realizó la Fundación Nueva Cultura del Agua pone en evidencia varias cosas, pero sobre todo dos: que las estimaciones sobre la magnitud e intensidad de las avenidas son claramente desproporcionadas, y que -incluso para hacer frente a esas previsiones- existen alternativas igualmente eficaces y menos dañiñas: recrecimiento y aumento de la capacidad de los aliviaderos de la presa de Calanda, ordenación de las zonas inundables aguas abajo de Calanda y, sin duda, una actuación más diligente que la habida hasta ahora (y así se evidenció durante la riada del año 2000) cuando existen avisos por fuertes precipitaciones.
Una vez más, como se hizo en su día en la cuenca del Matarraña, mediante el diálogo y la concertación, podemos evitar tan estéril y demoledor daño a nuestros pueblos y, al tiempo, garantizar la seguridad en las riberas de un río que, por lo demás (y aquí es donde se hace más descarado el "engorde artificial" de las previsiones de la CHE) no se ha mostrado particularmente peligroso: de hecho, ni siquiera aparece en el mapa de riesgos por inundación que el gobierno español ha remitido recientemente a la Unión Europea en cumplimiento de la Directiva que regula esta cuestión.
Recuperemos, pues, para la ciudadanía diálogo, alternativas, buen sentido y 60 millones de euros mejor empleados.
--------------
Presa d`Aiguaiva: gasto inútil, destrucció gratuïta
Què se podrie fer a la comarca del Baix Aragó si tinguerem 59,7 millons d`euros? Fer les obres de l`hospital d`Alcañiz? Desdoblegar los 30 km de la carretera nacional 232 que passen per la zona? Fomentar la instalació d`indústries ceràmiques que pugueren produir valor anyadit al mateix territori d`agon ixen les tiarres que ara són aprofitades a Castelló i València?
Pues no: en temps de crisis, retalls i penúries resulte que l`Estat està disposat a gastar-se totes estes perres en una presa de laminació de creixcudes al riu Bergantes que tots los llocs de la zona rechacen, que destruirie explotacions agrícoles, empreses turístiques, zones protegides, tolls d`aigua cristalina, jaciments arqueològics i un paisatge preciós. Les ansies per dur esta obra cara davant, caigue qui caigue, són tals que lo Goviarn d`Aragó ha decidit tirar a la paperera l`expedient sobre la declaració com a Lloc d`Interès Geològic d`este riu (en informe, per lo que pareix, favorable) a causa del projecto del pantano. Ixo vol dir que les peces d`interès geològic (o mediambiental, cultural, etc.) existixen o no en funció de que no "moleston" a la ejecució dels agressius projectos que priorice lo nostre goviarn. Què insult a la inteligència!
L`estudi que sobre este projecto va fer la Fundació Nova Cultura de l`Aigua posa en clar algunes coses, però sobre tot dos: que les estimacions sobre la magnitut i intensidat de les riades són clarament desproporcionades, i que per a fer front a estes previsions n`hi han alternatives que funcionarien igual de bé i tindrien menos afeccions: recreiximent i aument de la capacidat dels aliviaderos de la presa de Calanda, ordenació de les zones inundables aigües avall de Calanda i, també, una actuació més diligent que la que ha fet hasta ara la Confederació (i aixis se va evidenciar durant la riada de l`any 2000) quan tinguen avisos per fortes plogudes.
Una volta més, com se va fer al seu dia a la conca del Matarranya, parlant i participant tots, podem evitar tan estèril i demolidor mal als nostres llocs i, al mateix temps, donar seguridat a les riberes d`un riu que, per lo demés (i ací és agon se fa més descarat “l`engorde artificial" de les previsions de la CHE) no s`ha mostrat particularment perillós: de fet, ni siquiera apareix al mapa de perills per inundació que lo goviarn espanyol ha enviat fa molt poc a la Unió Europea en cumpliment de la Directiva que regule esta qüestió.
Recuperem, pues, disposició a parlar, alternatives, bon sentit i 60 millons d`euros millor empleats.