'El
Bergantes no se toca' apoya la manifestación de este sábado en Pamplona
contra el recrecimiento de Yesa y suscribe el manifiesto
elaborado por las organizaciones convocantes (Asociación Río Aragón, YESA+NO Lanak gelditu y URA-Nueva Cultura del Agua), por las siguientes razones:
Yesa es un grave problema para la seguridad de las poblaciones que viven aguas abajo
Las obras de recrecimiento han agravado y puesto en evidencia el grave riesgo que supone embalsar agua en la inestable cerrada de Yesa. Persisten los deslizamientos de las laderas que no se resuelven con los millonarios desmontes que están realizando. La CHE intenta minimizar el problema tergiversando los coeficientes de seguridad exigibles e infravalorando los riesgos sísmicos. El Gobierno de Navarra calla y otorga.
El recrecimiento es un despropósito económico, ambiental y social
No hay dinero para las prestaciones educativas, sanitarias y sociales, pero sí lo hay para esta obra que ha triplicado su presupuesto, pasando de 109 a más de 350 millones de euros.
El recrecimiento de Yesa es uno de los pilares del nuevo Plan Hidrológico del Ebro que, ignorando el cambio climático, pretende sustraer todavía más agua de los ríos, afectando a su estado ecológico y amenazando el uso sostenible del agua por las futuras generaciones.
Por otro lado, supondría otro duro golpe para los territorios aguas arriba de la presa, que ya sufrieron las consecuencias del actual embalse y que ahora tratan de frenar una nueva expropiación de sus tierras de cultivo y, por tanto, de su medio de vida.
Se están ocultando los objetivos reales del proyecto, que no responden a las necesidades de la sociedad, sino a los intereses especulativos de los sectores del hormigón y la electricidad. La reforma de la Ley de Costas del pasado año abre las puertas a nuevas urbanizaciones y consiguientes demandas de agua en el litoral y la reforma, este año, de la Ley de Evaluación Ambiental las abre a la privatización del agua y a los trasvases, en los que pretenden que Yesa juegue un papel clave.
Existen alternativas que compaginan la seguridad con los usos del actual embalse
Existen estudios, que no se quieren tener en cuenta, que demuestran que es posible compaginar la seguridad, bajando la lámina del embalse hasta la toma del canal, con el mantenimiento de los principales usos de Yesa, mediante la construcción de embalses laterales a lo largo del canal y la reestructuración de las explotaciones.
POR TODO ELLO, APOYAMOS LA MANIFESTACIÓN DEL 31 DE MAYO PARA EXIGIR:
La anulación de modo definitivo e irreversible del proyecto de recrecimiento del embalse de Yesa, por los evidentes problemas de seguridad que conlleva y por su falta de sostenibilidad económica, social y ambiental.
Que se tomen las medidas inmediatas que redunden en la seguridad de las poblaciones aguas debajo de la presa: estudios independientes sobre la seguridad de la presa y de los impactos de su posible rotura, planes de emergencia de las poblaciones afectadas y medidas de prevención de riesgos no permitiendo el llenado del embalse por encima de una cota de seguridad.
Que se contemple las alternativas que compaginan el aumento de la seguridad de las poblaciones aguas abajo con el mantenimiento de los principales usos del embalse.
En Aguaviva, a 29 de mayo de 2014
Asociación 'el Bergantes no se toca'
Yesa es un grave problema para la seguridad de las poblaciones que viven aguas abajo
Las obras de recrecimiento han agravado y puesto en evidencia el grave riesgo que supone embalsar agua en la inestable cerrada de Yesa. Persisten los deslizamientos de las laderas que no se resuelven con los millonarios desmontes que están realizando. La CHE intenta minimizar el problema tergiversando los coeficientes de seguridad exigibles e infravalorando los riesgos sísmicos. El Gobierno de Navarra calla y otorga.
El recrecimiento es un despropósito económico, ambiental y social
No hay dinero para las prestaciones educativas, sanitarias y sociales, pero sí lo hay para esta obra que ha triplicado su presupuesto, pasando de 109 a más de 350 millones de euros.
El recrecimiento de Yesa es uno de los pilares del nuevo Plan Hidrológico del Ebro que, ignorando el cambio climático, pretende sustraer todavía más agua de los ríos, afectando a su estado ecológico y amenazando el uso sostenible del agua por las futuras generaciones.
Por otro lado, supondría otro duro golpe para los territorios aguas arriba de la presa, que ya sufrieron las consecuencias del actual embalse y que ahora tratan de frenar una nueva expropiación de sus tierras de cultivo y, por tanto, de su medio de vida.
Se están ocultando los objetivos reales del proyecto, que no responden a las necesidades de la sociedad, sino a los intereses especulativos de los sectores del hormigón y la electricidad. La reforma de la Ley de Costas del pasado año abre las puertas a nuevas urbanizaciones y consiguientes demandas de agua en el litoral y la reforma, este año, de la Ley de Evaluación Ambiental las abre a la privatización del agua y a los trasvases, en los que pretenden que Yesa juegue un papel clave.
Existen alternativas que compaginan la seguridad con los usos del actual embalse
Existen estudios, que no se quieren tener en cuenta, que demuestran que es posible compaginar la seguridad, bajando la lámina del embalse hasta la toma del canal, con el mantenimiento de los principales usos de Yesa, mediante la construcción de embalses laterales a lo largo del canal y la reestructuración de las explotaciones.
POR TODO ELLO, APOYAMOS LA MANIFESTACIÓN DEL 31 DE MAYO PARA EXIGIR:
La anulación de modo definitivo e irreversible del proyecto de recrecimiento del embalse de Yesa, por los evidentes problemas de seguridad que conlleva y por su falta de sostenibilidad económica, social y ambiental.
Que se tomen las medidas inmediatas que redunden en la seguridad de las poblaciones aguas debajo de la presa: estudios independientes sobre la seguridad de la presa y de los impactos de su posible rotura, planes de emergencia de las poblaciones afectadas y medidas de prevención de riesgos no permitiendo el llenado del embalse por encima de una cota de seguridad.
Que se contemple las alternativas que compaginan el aumento de la seguridad de las poblaciones aguas abajo con el mantenimiento de los principales usos del embalse.
En Aguaviva, a 29 de mayo de 2014
Asociación 'el Bergantes no se toca'
